Las durezas son parches de piel seca que aparecen en la piel, se producen por el exceso de roce y presión. Normalmente se debe al uso de un calzado inadecuado o bien por la realización de ejercicio físico. Las durezas pueden aparecer en cualquier parte del cuerpo donde haya roces, sobre todo en los pies, en los dedos, en el talón y en las palmas de las manos.
Al igual que los callos, las durezas son un mecanismo de defensa para proteger la piel en la zona afectada. Las durezas pueden causar molestias, aunque no son peligrosas; por otro lado los callos sí que pueden causar dolor.

¿Cómo aparecen las durezas?
Las durezas son muy comunes, en los pies están causadas generalmente por el uso de un calzado inadecuado, mal ajustado, no usar calcetines o caminar sin protección. De esta manera, aumenta el roce y, por consiguiente, la piel se endurece como consecuencia. Donde es más propenso a sufrir durezas es en el talón y la zona inferior del antepié, debido a una distribución concentrada en dichos puntos de apoyo.
Las personas con otros problemas en los pies, como pie cavo, rodillas en X, juanetes, o bien con mucha actividad de pie como los camareros o deportistas, son más susceptibles de generar durezas y callos. En cuanto a género, las mujeres son más propensas a desarrollarlas debido a los tacones.
¿Cómo se forman las durezas?
La capa externa de la piel está formada principalmente por unas células queratinocitos. Este tipo de células producen queratina, una sustancia que forma una estructura resistente. Esta estructura ayuda a proteger tu cuerpo de los factores ambientales, como el calor, la radiación UV o las infecciones. Las durezas son el resultado de una mayor producción de queratina, profesionalmente llamada hiperqueratosis, que es la forma en que tu cuerpo se protege de la fricción o exceso de presión.

¿Por qué me salen durezas?
Las durezas aparecen por la forma en la que caminamos y nos mantenemos de pie. Cuando caminamos se transfiere todo el peso de nuestro cuerpo desde el talón hasta el antepié. En estas dos zonas, la piel es más gruesa para proteger el pie y aguantar la presión recibida. Cuanto mayor sea la presión, la piel responde con un engrosamiento en forma de dureza o de callo. Así pues, la formación de durezas es la consecuencia del cuerpo a la fricción del roce de la piel o por excesiva presión contra el zapato (inadecuado), el suelo o el hueso del propio pie.
Como hemos explicado, una dureza es una zona de la piel amplia, gruesa y dura, en los pies o palma de las manos generalmente. También es síntoma de problemas en los huesos, anomalías en la forma de caminar o el uso de calzado inadecuado (zapato y/o plantilla inadecuada). Las personas con la piel más seca, y por tanto, con menos sensibilidad en la zona, son más propensos a la aparición de durezas. La edad también es un factor de riesgo, ya que la grasa de la piel tiende a disminuir con el paso de los años y hace que la piel sea menos flexible, y reduzca la protección y amortiguación en los pies.
Llevar zapatos de tacón o calzado mal ajustado al pie, son las causas más comunes de la aparición de durezas. De hecho, el uso de zapatos demasiado altos, arqueados, con suela dura o de cuero, afecta en gran medida a la distribución del peso en los pies y, por lo tanto, al concentrar el peso en menos área de contacto con el suelo, incrementa las posibilidades de desarrollar durezas.
Si practicas ejercicio físico, estás de pie durante periodos largos de tiempo, o si no utilizas calcetines o calzado adecuado, tendrás más probabilidades de tener durezas.

¿Qué debo hacer para quitar o prevenir las durezas?
Puedes tratarlas en casa, con un poco de paciencia. Para quitar la dureza leve, puedes ablandar la zona, poniendo el pie en remojo con agua tibia y con jabón, puedes usar también otros ingredientes para facilitar su extracción como las Sales de Epsom, cremas exfoliares o bicarbonato de sodio, apósitos para durezas, etc. Una vez blanda, puedes ir retirando capas con una piedra pómez o lima de pies. En casos más severos, es aconsejable ir a un especialista que le ayude a eliminarlo y tratarlo correctamente.
Una vez reducido o eliminado, es recomendable tomar medidas de prevención para que la dureza o callo no reaparezca, sino que habrá que repetir de manera cíclica el paso anterior. Estas medidas incluyen el uso de almohadillas de gel protectoras BIOGEL o plantillas de calidad UNIVERSAL de Dr. Kong, y usar zapatos adecuados y saludables.
En Dr. Kong, ofrecemos una solución completa para la prevención de las durezas, analizamos tus pies con la tecnología Check&Fit®, donde vemos la morfología, los puntos de presión, y otros datos relevantes de tus pies, para determinar cuál es la plantilla que mejor se ajusta a sus características y el tipo de zapatos que complementa su prevención. En caso necesario, tenemos apósitos de gel BIOGEL que completa cualquier otra necesidad.

Fuentes:
- https://www.mayoclinic.org/diseases-conditions/corns-and-calluses/ diagnosis-treatment/drc-20355951
- https://www.aad.org/public/everyday-care/injured-skin/burns/treat-corns calluses
- https://www.apma.org/corns
- https://www.foothealthfacts.org/conditions/callus